Una de las últimas tertulias del año, la plática muy nutrida y hablamos mucho todas. También sobre hechos científicos relacionados con la lectura, a propósito de la sociedad tan cerrada de la Rusia de la época y de los nobles “de sangre azul”, un poco al margen, pero siempre interesante, Odilia nos ilustró acerca de los cangrejos cacerola que en verdad tienen la sangre azul, pues en lugar de hierro tienen cobre en la sangre. Científicamente su sangre se usa para verificar la presencia de toxinas en productos inyectables.